Y entendí que me quería. Me quería los jueves por la noche y hasta los martes por la mañana.
Me quería a copas, a cervezas y a chupitos. Me quería en mitad del caos y salvándole de su tranquilidad. Me quería en paz y pidiendo guerra. Me quería bailando a besos y besándonos en mitad del baile.
Me quería desastre y desordenado. Me quería sin parar y a ritmo pausado. Me quería sin peros y hasta con por qués. Me quería de su mano y en su tripa. Me quería viéndome y evitándome. Me quería a WhatsApp’s y hasta en persona. Me quería orgulloso y a escondidas. Me quería en pasado y, a veces, hasta en futuro.
Me quería a gritos y al oído. Me quería encima y por debajo. Me quería sin miedo y acojonado. Me quería salvajemente equivocado. Me quería en lo cierto e inesperado. Me quería sin nadie y conmigo. Me quería incluso cuando no lo creía porque me quería sin querer y queriéndome.
Y que sí, que ya no me quiere. Pero joder, cuánto me quiso.
Ángel Ludeña.
Te quiero❤️Ayer hoy mañana y siempre❤️